A través del vocero presidencial, Manuel Adorni, el gobierno emitió una advertencia a la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) por la ocupación «pacifica» de edificios públicos en protesta por los 15.000 despidos de trabajadores estatales.
Adorni señalo que cualquier actividad que transgrediera la ley tendría sus respectivas consecuencias. Además afirmo, en su habitual conferencia de prensa; «Todo el que esté cometiendo algún acto fuera de la ley, va a tener sus consecuencias»
Esta mañana, algunos de los trabajadores estatales recientemente despedidos intentaron entrar a sus lugares de trabajo en el ex INADI, cerrado por el gobierno hace algunas semanas, asi como en la Secretaria de Trabajo, que esta bajo la jurisdicción del Ministerio de Capital Humano dirigido por Pettovello.
En la puerta de los edificios, se encontraron con un fuerte operativo de seguridad implementado conjuntamente por el Gobierno nacional y el Gobierno de la Ciudad para evitarle la entrada a los dirigentes gremiales y a los empleados.
«No hay plata para comprar comida, no hay plata para comprar remedios, pero si hay plata para reprimir» denuncio Rodolfo Aguilar, secretario general de ATE.
