El proyecto para la creación de una comisión investigadora en el Senado, impulsado por el senador radical Pablo Blanco y con la firma inicial del senador Vischi, no logró prosperar en la última sesión debido a un cambio inesperado en el voto del jefe de bancada de la UCR. A último momento, Vischi decidió anular su firma, lo que impidió que el proyecto alcanzara la mayoría especial de 48 votos necesarios para su conformación.
En la votación participaron 34 senadores de Unión por la Patria (UxP) y 13 senadores de la UCR que respaldaron la creación de la comisión, pero, a pesar de ese apoyo, el proyecto no obtuvo la cantidad requerida de votos. Es importante destacar que el voto faltante fue el de Vischi, quien había sido presionado por diversas autoridades políticas, incluido el Ejecutivo Nacional y los gobernadores de las provincias. El caso específico del gobernador de Corrientes, quien tiene una influencia significativa sobre Vischi, es uno de los factores que habría motivado el cambio en su postura.

Eduardo Alejandro Vischi (Paso de los Libres, Corrientes, 3 de noviembre de 1970), conocido como «Peteco Vischi», inició su carrera política como Subsecretario de Trabajo en la Provincia de Corrientes en 2001. Fue Intendente de Paso de los Libres (2005-2009), Viceintendente (2013-2014), y Diputado Provincial (2017). En 2021, asumió como senador por «ECO+Vamos Corrientes». Actualmente, integra varias comisiones en la Cámara Alta, como Asuntos Constitucionales, Justicia, Trabajo, Industria y Población. En 2017, fue denunciado por presuntos delitos relacionados con el gobernador Ricardo Colombi y otros funcionarios, incluyendo asociación ilícita y administración fraudulenta.
Durante todo el día previo a la sesión, se reportaron intensas negociaciones y presiones por parte del Poder Ejecutivo sobre los mandatarios provinciales, lo que afectó la postura de varios senadores de la UCR. Entre ellos se incluyen a Víctor Zimmerman (Chaco), Stella Maris Olalla (Entre Ríos), Mariana Juri (Mendoza), Eduardo Galaretto (Santa Fe) y Mercedes Valenzuela (Corrientes). Además, según algunas fuentes, antes de la votación, Vischi mantuvo una reunión con el jefe del bloque de La Libertad Avanza (LLA), Ezequiel Atauche, quien también habría influido en su decisión de no apoyar el proyecto.
El fracaso de este proyecto refleja la complejidad política dentro del Senado y la división en la bancada de la UCR. Sin embargo, más allá de las diferencias internas, es fundamental entender la importancia de la creación de esta comisión investigadora. La comisión tenía como objetivo esclarecer y analizar hechos de relevancia que podrían haber tenido impacto en la transparencia y el buen funcionamiento de diversas instituciones del país. Una comisión de este tipo no solo hubiese servido para generar un espacio de control y rendición de cuentas, sino que también habría enviado un mensaje de compromiso con la transparencia y la lucha contra la corrupción.
La creación de comisiones investigadoras es una herramienta esencial en los sistemas democráticos, ya que permiten que los legisladores ejerzan funciones de control y fiscalización sobre el poder ejecutivo y otras entidades del Estado. En este caso, la comisión propuesta tenía el propósito de abordar casos específicos que afectaban la confianza pública en las instituciones, brindando una plataforma formal para investigar y presentar soluciones ante posibles irregularidades.
El hecho de que no se haya logrado la conformación de la comisión refleja no solo la falta de consenso político, sino también el desafío de garantizar que el sistema de control legislativo funcione de manera efectiva en contextos de alta polarización política. La división interna dentro de la UCR, sumada a las presiones externas, dificultó que se llegara a un acuerdo que pudiera contribuir a la transparencia en la gestión pública.
En los próximos días, se espera que la discusión sobre la creación de la comisión investigadora se retome, con la posibilidad de que los actores políticos involucrados busquen encontrar nuevas estrategias para lograr su formación, aunque las dificultades políticas seguirán siendo un factor relevante en este proceso.
La postura de Lousteau:
El senador Martín Lousteau, líder de la bancada radical en el Senado, también expresó su posición respecto a la creación de la comisión investigadora y el voto de Vischi. Lousteau ha sido un firme defensor de la transparencia y el fortalecimiento de las instituciones democráticas, y ante este intento fallido de conformar la comisión, sostuvo que la creación de una instancia investigadora era fundamental para garantizar que los actos de gobierno fueran fiscalizados adecuadamente.
El senador destacó que el proyecto de creación de la comisión no solo respondía a una necesidad de transparencia, sino que también buscaba dar respuestas a inquietudes de la ciudadanía respecto a posibles irregularidades en el manejo de fondos públicos y otras cuestiones que requerían investigación parlamentaria. Lousteau también señaló que el fracaso de la comisión no era un golpe solo para la UCR, sino para el sistema democrático en su conjunto, ya que se perdió una oportunidad valiosa de garantizar el control de los poderes del Estado.
En cuanto a la decisión de Vischi de retirar su firma del proyecto, Lousteau expresó su descontento con las presiones políticas que se ejercieron sobre los senadores, considerando que estas presiones fueron incompatibles con los principios de independencia legislativa. A su juicio, el sistema democrático debe ser capaz de funcionar sin la intervención de actores externos que busquen influir en las decisiones de los legisladores.
El líder radical también hizo hincapié en la necesidad de que la UCR logre consensos internos y mantenga su unidad en cuestiones clave como la transparencia y la lucha contra la corrupción, especialmente en un momento donde la ciudadanía espera respuestas claras y eficaces de sus representantes. Según Lousteau, la falta de acuerdo en esta ocasión debe ser un llamado de atención para todos los actores políticos sobre la importancia de actuar con responsabilidad y coherencia frente a los desafíos que enfrenta el país.
Este episodio, según Lousteau, no debe hacer perder de vista el objetivo central: la defensa de la democracia y el fortalecimiento de las instituciones, valores fundamentales que deben guiar el trabajo legislativo.