El escenario político argentino se encuentra en un punto de alta tensión ante la posible resolución judicial que podría declarar culpable a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner en la causa Vialidad. En medio de esta incertidumbre, CFK se definió como «una fusilada que vive», justo en el aniversario de los fusilamientos de José León Suárez.
Las máximas autoridades del Partido Justicialista (PJ) Nacional y local siguen de cerca el proceso judicial, mientras crecen las especulaciones sobre la reacción del movimiento peronista en caso de una condena. La historia ha demostrado que el peronismo ha sabido movilizarse en defensa de sus líderes, como ocurrió en décadas pasadas con la participación masiva de trabajadores, sindicalizados o no.
El fallo judicial sobre Fernández de Kirchner ha generado diversas posturas dentro del espectro político. Mientras algunos sectores denuncian una persecución judicial, otros sostienen que se trata de un proceso legítimo que busca esclarecer presuntas irregularidades en la obra pública.
Todo indica que esta semana, no estará el veredicto.
CFK, se parece a Wanda Nara, cambia la agenda mediática del país. Pero todo sigue su curso.
¡SI LA TOCAN A CRISTINA QUE KILOMBO SE VA ARMAR!
La historia no tan reciente del peronismo recuerda la detención de Gerónimo «Momo» Venegas, un dirigente sindical que muchos consideraban el último peronista auténtico, fue titular de la UATRE, el gremio que nuclea a los trabajadores rurales, en el marco de la causa por el tráfico de medicamentos adulterados, por la que ya había estado detenido Juan José Zanola, jefe de La Bancaria. Venegas fue el secretario general de las 62 Organizaciones Peronistas y aliado de Eduardo Duhalde.
¿Que pasara si la justicia se expide?
Diversas organizaciones gremiales y movimientos sociales han anunciado movilizaciones en apoyo a la expresidenta, denunciando lo que consideran un intento de proscripción política. Por otro lado, figuras de la oposición han celebrado la decisión judicial como un paso hacia la transparencia institucional.
En su discurso, CFK evocó la histórica represión de 1956 y estableció un paralelismo con su situación actual, afirmando que su posible condena es parte de una persecución política. La frase generó reacciones diversas, con sectores que la respaldan y otros que la cuestionan por apropiarse de un episodio trágico de la historia argentina.
El desenlace de este proceso marcará un hito en la historia política argentina. La pregunta que muchos se hacen es si el PJ reaccionara con la misma fuerza que en el pasado o si el contexto actual dará lugar a una nueva estrategia de resistencia.
CRISTINA LA MEJOR ESTRATEGA,
LA MEJOR ORADORA. Y LA MEJOR ENGAÑADORA.
Si sos de CFK, sabes que te está mintiendo. ¡Sabelo!
Quien es el dirigente que mejor se posiciona con CFK, presa y condena.
Si es él:
